Antoni Ferrer, director de la Agencia Menorca Talayótica, ha participado en el primer congreso internacional “Cerdeña, la Isla de los nuraga” que durante los días 16 y 17 de noviembre ha reunido a un nutrido grupo de expertos internacionales en la isla italiana. Focalizado en promover la candidatura del patrimonio nurágico sardo a Patrimonio Mundial de la UNESCO, los organizadores han querido contar con la participación de Ferrer para explicar la experiencia de Menorca Talayótica.
Con el título "Lugares insulares: características y gestión. El caso de Menorca, nuevo bien UNESCO 2023”, el director de la agencia puso de relieve la singularidad de Menorca como tesoro arqueológico, además de profundizar en los logros conseguidos y los retos que afronta a partir de ahora Menorca Talayótica. Ferrer destacó como puntos clave garantizar la buena conservación de los yacimientos que no cuentan con control de acceso ni sistemas de vigilancia, evitar que la inscripción contribuya a la masificación la isla, y establecer un sistema estable de colaboración entre la agencia y los propietarios de los bienes.
El panel de la conferencia estuvo formado por arqueólogos, economistas, expertos en marketing, gerentes de gestión, antropólogos y genetistas con el objetivo de hacer entender que la ayuda de diversas ciencias y profesionales es necesaria para poder comunicar el inmenso valor de una civilización antigua y el paisaje monumental que da testimonio de su grandeza y su singularidad.
Su Nuraxi de Barumini
A principios del segundo milenio a.C., en la Edad de Bronce, se creó en la isla de Cerdeña un tipo de estructura defensiva llamada nuraghi, unas torres circulares, en forma de conos truncados, construidas con sillares de grandes dimensiones. El ejemplo más bello y completo de esta notable construcción arquitectónica prehistórica lo ofrece el conjunto de Barumini, que fue ampliado y reforzado en la primera mitad del primer milenio a.C. ante la presión de los cartagineses.
Esta zona arqueológica comprende un nuraga complejo y un importante poblado de cabañas, un lugar único, que la Unesco declaró Patrimonio de la Humanidad en 1997. El sitio arqueológico fue sacado a la luz en los años cincuenta del siglo pasado gracias a las excavaciones realizadas por Giovanni Lilliu. Des de 2021, Cerdeña busca que la UNESCO reconozca todo su territorio como “museo abierto” y paisaje cultural.
XVII Encuentro de Gestores de Patrimonio Mundial
Por otra parte, la jefa del Servicio de Patrimonio Histórico del Consell Insular, Joana Gual, participó el 17 de noviembre en el XVII Encuentro de Gestores de Patrimonio Mundial que se celebró en Madrid la semana pasada.
En la mesa sobre participación ciudadana,
Gual explicó el largo proceso para conseguir que Menorca Talayótica sea Patrimonio Mundial, exponiendo las iniciativas de sensibilización realizadas por el Consell Insular, las actividades participativas organizadas en el marco de tres congresos internacionales de buenas prácticas, las propuestas y acciones ejecutadas por entidades tanto públicas como privadas así como los desafíos que a lo largo de los años se han formulado en diferentes ámbitos de participación.
En este foro anual, creado en 2007 por el Ministerio de Cultura y Deportes, se analiza y debate sobre iniciativas y proyectos de gestión de los sitios inscritos en la Lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO. Se trata de un encuentro muy valorado entre los gestores porque permite compartir experiencias, conocer pautas de actuación distintas y confrontar criterios que contribuyen a una mejor gestión.