El monumento prehistórico conocido como sala hipóstila de Es Galliner de Madona o de Binigaus Nou se encuentra clasificado dentro de la tipología de "sala hipóstila", también definido por otros autores como "recinto cubierto". Se trata de una edificación aislada, con una fachada recta, donde se sitúa la entrada original, hoy cegada. En su interior se encuentran 5 columnas exentas y 9 pilastras adosadas a los muros, que sostienen una cubierta de grandes losas de piedra
No se conoce la función ni la cronología precisa de este edificio, ya que nunca ha sido objeto de ninguna intervención arqueológica. El carácter único de Es Galliner de Madona viene dado, en primer lugar, por su extraordinaria monumentalidad y, además, por las referencias que ya aparecen en algunas de las publicaciones pioneras sobre arqueología menorquina en el siglo XIX. El edificio se encuentra situado justo al borde del acantilado de un ramal del barranco de Binigaus, de forma que a la monumentalidad del propio edificio hay que añadir la espectacularidad del entorno
El monumento se encuentra dentro de una propiedad privada, pero es posible visitarlo si se contacta previamente con la propiedad y se concierta el día y hora de visita.
Aunque el edificio se mantiene en pie de forma casi íntegra, se encuentra gravemente alterado debido a la lenta, pero, constante filtración de agua en los pilares y columnas interiores, que disgrega y fragmenta los diferentes elementos estructurales de la cubierta, provocando un desgaste desigual a la piedra que genera desestabilización estructural. Las alteraciones provocadas por el agua, no afectan sólo a las columnas y pilastras. Durante épocas de lluvia, se forman balsas de agua que afectan a los muros inferiores. Esta agua se concentra en algunas zonas y penetra por capilaridad en el interior de los muros.
La vegetación es también uno de los agentes de degradación que afectan al muro. Las raíces de los diferentes tipos de plantas penetran en la roca y provocan desprendimientos irreversibles: a nivel superficial (pequeñas plantas) o, a nivel más agresivo cuando se trata de matas.
Para evitar el colapso del edificio, el Consell Insular decidió encargar un proyecto de restauración y consolidación, que permitiera tener un presupuesto de ejecución y poder encargar posteriormente la obra propiamente dicha. Se pidieron varios presupuestos, y finalmente la redacción del proyecto se encargó al equipo formado por Oscar Paradís (arquitecto), Carolina Moreno (restauradora) y Damià Ramis (arqueólogo), por un importe de 6.400 euros más IVA.
Dentro del ámbito de este proyecto, ya elaborado, se ha realizado un levantamiento topográfico en tres dimensiones del edificio. Esto permitirá actuar con todas las garantías de mantener la disposición original de los elementos, en aquellos casos en que se hayan de remover y volver a poner en su sitio.
Los objetivos que se plantean en este proyecto son:
- Estabilización de la cubierta.
- Impermeabilización de la cubierta.
- Eliminación del muro moderno de piedra arenisca, localizado en el fondo del bien.
- Limpieza de toda la vegetación.
- Limpieza de restos biológicos de los muros interiores.
- Recolocación de cuñas entre las piedras con el fin de garantizar la estabilidad interior de muros y columnas.
- Recuperación de la entrada antigua al monumento.
- El cierre mediante rejas en las entradas de acceso al interior.
Las intervenciones previstas y consensuadas con el equipo para la consolidación y restauración del monumento son las siguientes:
Apeo del interior de la sala hipóstila.
Recolocación de las dos losas de cubierta detectadas en la zona hundida del fondo de la sala.
Unión mecánica de las piezas fracturadas mediante un sistema de barras corrugadas de acero inoxidable fijadas con resinas epoxídicas. (Dos losas interiores y el tambor superior de una de las columnas).
Eliminación de los elementos no originales y que no tienen función estructural como muros de pared seca realizados como divisoria interior.
Recuperación del acceso original actualmente tapiado mediante la eliminación de pared seca recuperando y recolocando las losas intermedias.
Impermeabilización de la cubierta mediante la colocación de una lámina impermeable integrada en el espesor de tierra existente actualmente en la cubierta.
Recolocación de cuñas entre las piedras en el conjunto interior.
Limpieza selectiva de todos los montones de piedras que hay en las zonas hundidas.
Ejecución de medidas de protección del acceso a la cubierta del monumento mediante unas barandillas de acebuche, creando una barrera física integrada en el paisaje rural del que forma parte el monumento.
Además de los objetivos principales, vinculados a la restauración, es posible que la intervención aporte datos respecto a la cronología y la función del monumento.
Todas estas actuaciones tendrán un coste aproximado de 63.250 euros más IVA y, por tanto, su ejecución se sacará a concurso.